No soy de hablar mal de las personas a través de mi blog, pero hace mucho tiempo que no sentía esta necesidad de descargarme. Cada vez soporto menos a cierta gente de mi división. Nunca me llevé mucho con ellos, pero hasta ahora no pensé que encontraría si quiera un argumento como para querer empezar la facultad: no tener que bancarme más a una caterva de pelotudos sin vida que no tienen algo mejor que hacer que ir descansando a quien crean que es 'inferior' a ellos. ¿Realmente dependen de tirar abajo a los demás para sentirse tan superiores? Siento un poco de lástima por ellos, por el futuro que les espera si no se esmeran por cambiar cuestiones básicas.
El domingo hay una fiesta del colegio que en teoría organizamos nosotros, y que realmente son únicas, es muy difícil no pasarla bien con tu promoción y las otras dos. Esa misma noche hay una fiesta electrónica que nada que ver con la vida. ¿A cuál decidí ir? A la segunda. ¿Por qué, si siempre hago preferencia por las fiestas del colegio? Será porque entendí que ya no vale la pena convencer a algunas amigas de que salgan conmigo, así que cuando hay una oportunidad de que lo hagan, sigo sus planes con los ojos cerrados. Tal vez porque ya me chupa un huevo y medio lo que piense el resto ¿acaso tengo que pedir perdón por elegir salir con MI GRUPO DE AMIGAS a salir con la promoción, gente con la que nunca hablé en mi vida ni pienso hacer? Perdón, entonces. Total no voy a cambiar los planes.
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